Al revelarse el estado grave de Teresa, Madre María de Gonzaga -priora desde marzo del 96- empieza a cuestionarse el contenido de la Carta circular que se mandará a los carmelos tras la muerte de Teresita. Inés le revela entonces la existencia del Manuscrito A y pide a la priora que anime a su hermana a continuar consignado sus recuerdos de Vida Religiosa. Por fin, y a petición de Madre María de Gonzaga (Ms C, 1r), redactó en junio de 1897 un Manuscrito en el que recoge los recuerdos de sus últimos años de vida religiosa; en este texto encontramos hermosas reflexiones de Teresa sobre la caridad fraterna.
Es el Manuscrito C (Ms C), en el que hemos de destacar los siguientes temas:
La noche de la fe, profunda crisis de purificación que lleva a Santa Teresa de Lisieux a convertirse en hermana de los ateos y los pecadores, de los que se hace portavoz.
La formulación, fundada en la Sagrada Escritura, de su pequeño camino con el símbolo del ascensor, imagen de Dios misericordioso que quiere que todos se salven y lleguen al conocimiento de la Verdad, que es Él mismo.
La plenitud de la caridad.
La fuerza de la oración.