Y no volara si no escribiera
"¡Ay, qué larga es esta vida!
¡Qué duros estos destierros,
esta cárcel, estos hierros ..."
Teresa de Jesús
I
¡Cuan grave, oh muralla,
me respiras y consientes!
Peso secular que me aherroja
el alma, la envuelve y arrastra.
¡Oh precipitado, ansioso crujir,
inadecuado vestido de fiesta
bajo el resplandor de la luna
escarchada de hastío!
II
Mas yo quisiera volar
lejos de la sangre oscura.
¡Ay prisionera, edad ingrata!
Si pudiera volver a las ermitas
o descalza pisara de nuevo
el amor de la hierba.
Si junto al pozo otra vez
bebiera el aliento perfumado
de los insectos,
o volar
mas no escribir ,
si no fuera obediencia
y no volara si no escribiera
-repugnancia o deseo
de romper la prisión-
¡Ay de la pluma rota y manchada!
¿Dónde las alas de mi decir?
III
Ahora mi alma reposa,
mi deseo nunca más esquivo
eternamente consagrado,
amen, junto al ameno rio,
brazo incólume que sostuviera
la pluma y el ala rota.
Corazón intempestivo,
de nuevo aherrojado, mas ya no preso,
plata realzada en su ardor.
Alba, le dicen, junto al río,
de Tormes, amanece tal vez,
otra luz se respira, donde mi Bien
irrumpe y arrasa,
me resucita y libera por siempre
esta cárcel y estos hierros
en que el alma está metida