Cites Aerea

El Centro Internacional Teresiano-Sanjuanista (CITeS) - "Universidad de la Mística" es una institución formativa cuya misión es contribuir con la formación espiritual, académica y cultural de quienes se acercan a ella. Busca promover la investigación en el campo de la mística y propiciar el diálogo entre el fenómeno místico y las ciencias que afectan directamente la existencia humana personal y social. Todo esto, teniendo como referencia fundamental la experiencia de Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz.

El CITeS surge en 1986 en el marco del cuarto centenario de la muerte de Teresa de Jesús y Juan de la Cruz (1982 y 1991 respectivamente), como una institución educativa dedicada a promover el estudio sistemático de la vida y obra de estos santos y doctores de la Iglesia, y transmitir su honda experiencia espiritual y mística. Un valioso legado que llega hasta nuestros días, oportuna reliquia de tiempos pasados.

Si hoy usamos también el término “Universidad de la Mística”, ciertamente no lo hacemos en el sentido común desde el cual hoy se entiende una institución universitaria. Con esta denominación hacemos referencia a su sentido originario y etimológico, como lugar de encuentro universal, como espacio libre para la reflexión, el pensamiento, el saber. Porque creemos que la Mística es un “saber” que tiene un estatuto particular, pero que se abre a una perspectiva de diálogo interdisciplinar, donde todo, lo que de una u otra manera afecta al conocimiento del ser humano, se interrelaciona con el Misterio. Una "Universidad", pues, que habla de una vocación a la inclusión, a la universalidad, a la perspectiva e interrelación holística del saber. De ahí que todas las ciencias humanas se interrelacionan en la común misión de dar luz a la comprensión del hombre, del sentido de la vida, de la importancia de la apertura a la dimensión trascendental de la existencia. En definitiva, un camino, un espacio para promover la unidad, la universalidad, el diálogo y el encuentro.

"Universidad" que alcanza su más amplio sentido, lugar universal pisado y recorrido por cientos de personas que llegan desde los cinco continentes; diversidad cultural que comparte el apetito del saber más sobre Teresa y Juan, fundadores del Carmelo Descalzo.

Lo que en un primer momento representó para los Carmelitas Descalzos un instrumento interno de profundización para los frailes miembros de la Orden, se convierte en transmisor de saberes y experiencia a otros interlocutores y otras culturas. Así la herencia mística española pasa a ser Patrimonio de la Humanidad traspasando los muros del Carmelo.

Alumnos y profesores entablan unas insuperables Relaciones Humanas en una convivencia fraterna, reforzando el desarrollo personal de aquellos que acuden al CITeS.

El Centro es conducido por el gobierno general de la Orden de los Carmelitas Descalzos, con el apoyo de un Grupo Directivo nombrado para tales efectos, quienes animan y acompañan las siguientes ofertas educativas:

Dijo Dios: "Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza..." (Gn 1, 26). Con plena confianza en la persona el Centro promueve un clima de libertad y de respeto. Un lugar plural no sólo de estudio, sino también punto de encuentro y comunión, y es por ello que también abre sus puertas como casa de acogida a grupos organizados para su desarrollo en el terreno místico, humano o espiritual. Ayudan a este cometido diversas actividades: talleres, retiros, conciertos, viajes culturales, celebraciones litúrgicas, entre otros.

Propicia un ámbito de integración entre mística y razón, estrechamente ligada en la vida cristiana. Intenta iluminar desde la mística, problemas e interrogantes de la sociedad y del Hombre actual, en continuo cambio con innumerables desarrollos y mejoras pero, en ocasiones, con carencia de principios y valores. Para el CITeS el trabajo y esfuerzo personal y constante son estandartes para la convivencia y motores de progreso.

Ubicado en una ciudad de fuertes tintes místicos, el CITeS ocupa desde el 2008 una sede que reúne las condiciones idóneas para el estudio, la oración y la convivencia. Cuna natal y marco privilegiado para el contacto directo con Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz, entre piedras milenarias con las que se elevaron los torreones de su muralla. Un casco antiguo trazado para perderse en monumentos, iglesias y calles que un día recorrieron estos carmelitas descalzos. Contacto directo con lugares históricos erigidos después del paso de los místicos por la ciudad y en su honor. Ávila, tranquilidad que invita al peregrino a adentrarse en el fascinante mundo de la experiencia mística.

"Universidad de la Mística"

"Y será una estrella que dará de sí gran resplandor".

Con estas palabras le auguraba Cristo a Teresa de Jesús la vocación a la que ella y sus seguidores eran llamados. Y así desea el Carmelo Descalzo que esta "estrella" de la "Universidad de la Mística" pueda convertirse en luz para hombres y mujeres de nuestro tiempo. Un espacio y un lugar que no se cierra únicamente en un edificio peculiar, sino que también quiere abrirse al ciberespacio, y transmitir ese calor y esa luz que han de caracterizar nuestras vidas.

Si usamos el término "Universidad de la Mística", ciertamente no lo hacemos en el sentido común desde el cual hoy se entiende una institución universitaria. Con esta denominación hacemos referencia a su sentido originario y etimológico, como lugar de encuentro universal, como espacio libre para la reflexión, el pensamiento, el saber. Porque creemos que la Mística es un “saber” que tiene un estatuto particular, pero que se abre a una perspectiva de diálogo interdisciplinar, donde todo, lo que de una u otra manera afecta al conocimiento del ser humano, se interrelaciona con el Misterio. Una Universidad, pues, que habla de una vocación a la inclusión, a la universalidad, a la perspectiva e interrelación holística del saber. De ahí que todas las ciencias humanas se interrelacionan en la común misión de dar luz a la comprensión del hombre, del sentido de la vida, de la importancia de la apertura a la dimensión trascendental de la existencia. En definitiva, un camino, un espacio para promover la unidad, la universalidad, el diálogo y el encuentro.

cites